Gabriela Rincon (1989), es una apasionada del deporte. En su historia personal, desde muy pequeña ha visto ejercitarse como una pasión. Sus papás la impulsaron al igual que a su hermana, a integrarlo a sus vidas. Hoy, como una maratonista profesional, ganadora de podios en competencias de ésa índole, Gaby le da un giro muy interesante a ser un deportista: no empieza su día a las 5 am como muchos pensarían, procura mucho su sueño, su trabajo y su familia. Reconoce que no siempre quiere levantarse y entrenar, pero ha encontrado las formas para mantenerse motivada: incluir a sus amigos, tener un equipo, hacerse una cita para correr.

Gaby tiene una vida equilibrada y ha trabajado en su asertividad para poder establecer prioridades. Y considera que el deporte le ha otorgado muchas habilidades blandas que en ningún otro lado habría podido desarrollar: resiliencia, entrega, trabajo colaborativo. Y sobre todo disciplina y fuerza mental. Cuando siente que ya no puede o que está su meta está alejándose, su fuerza interior la hace desafiarse. Lo importante, para ella, más allá de elegir un deporte, una actividad manual o artística, es mantenerse curioso y dispuesto a aprender.

En ese sentido, y frente a la apabullante fuerza de la AI, las carreras del futuro, y un largo etc que nos pone ansiosos como generación, la propuesta de este episodio es cuestionar nuestro diferencial individual y cómo eso nos puede llevar más lejos.